Un corazon, sin freno, pero con marcha atras

Recibo un regalo de Murcia, bueno, es un regalo doble. Por una parte es un libro y por otra el reencuentro con un amigo de la escuela, de hace cuarenta años. El reencuentro es via internet, pero eso, es un hermoso y gran regalo para mi.
Jesus, me envia un libro desde Murcia, sobre Murcia, sobre mi barrio de San Antolin.
Lo encontro por casualidad y al verlo, dice que se acordo de mi y de que me gustaria. El solo hecho de que pensara en mi ya supone por si solo un emocionante acto de amistad, que me ha llegado al alma. Jesus, te estare, eternamente agradecido.
El libro hace un recorrido por todas las calles actuales y antiguas del barrio, con apuntes historicos de su creacion, transformacion o desaparicion, asi como del significado de su nombre: Alfande, Alfareros, Angustias, Federico Balart, Bendame, Bocio, Bolos, Pedro de la Flor, Carniceros, Almenara, ...esta ultima, meta diaria durante varios años, alli estaba el Colegio Academia Santo Angel de la Guarda y alli aprendi a leer y escribir con Don Joaquin, segui los estudios hasta casi acabar el bachillerato con Don Antonio y alli vivi unos maravillosos años con amigos de los que hace tiempo no se nada, pero que recuerdo con mucho cariño: Lajara, Adolfo, Fuentes, Parraga, Victor, Jose Lourdes, Jesus, ... y Maria Felix. Habian muchos mas, seguro que estan circulando por mi mente queriendo aparecer, pero la edad no perdona y las paginas en blanco son cada vez mas numerosas.
Sigue el libro describiendo a los personajes que dan nombre a las calles y su vinculacion con el barrio o con Murcia. A veces son gremios, fiestas o acontecimientos los que sirven para nombrarlas: Ceferino, Juan de la Cierva, Cristo del Perdon, Maestra Delia Bosque, Entierro de la Sardina, Ericas, Escultor Sanches Lozano, Garcia Alix, Gran Pez, Casanova, ...esta, en su trazado actual, trascurre sobre el espacio que ocupaba la casa donde naci y vivi durante muchos años; la calle es peatonal, quiero pensar, que de esta manera los recuerdos estan mas protegidos del pisoteo de coches y camiones.
Los actuales inquilinos de sus plantas bajas, son motivo de descripcion en el libro, tambien algunos de los antiguos, aunque desgraciadamente no todos. Echo de menos la referencia a la taberna de mi abuelo y por que no, a la tienda de mis padres que fue un referente importante en nuestra zona del barrio: Huertas, Mahonesas, Maestro Salvador Ortiz, Palomarico, Alcalde Gaspar de la Peña, Pilar, Pintor Sobejano, Pedro Pou, Pozo, Doctor Jose Lopez Aleman, esta de reciente incorporacion, a la memoria de mi tio, ocupa un espacio cercano al lugar donde estuvo mi casa. Vigilante del nacimiento de todos mis hermanos y mio, asi como de miles de niños en el barrio, ahora desde su atalaya, vigila el rinconcito que ha quedado lleno de recuerdos.
La historia del barrio es rica en acontecimientos, no en vano fue uno de los importantes, con puerta de entrada a la ciudad, por ella, la de Vidrieros, entro Carlos I y ante ella juro guardar los privilegios de la ciudad, Sagasta, Sanchez Maurandi, Sandoval, San Antolin, San Gines, San Julian, El Arbol, Santa Lucia, Angel Garcia, Torres, Turroneros y Vidrieros.
No estan todas, falta una, Manuel Muñoz de la Peña; no es un olvido, es un nombre oficial impuesto en 1942, pero del que nacia hizo uso. El nombre aparecia rotulado en la calle, pero todo el mundo quiso siempre nombrarla por el que fue nombrada en 1911: Calle de la Lealtad. Me hubiese gustado poder deciros: Alli en el numero 42, teneis vuestra casa. Alli, tengo mis recuerdos.

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Reflexiones personales, pero que a veces nos son cercanas. Buenas fotografias que acompañan en la reflexion. Un buen lugar.