jueves, 17 de abril de 2008

Lo que el tiempo no se llevo

Hace unos dias, un oyente de Hoy por Hoy, hacia constar su sorpresa de ver un crucifijo en la jura de los ministros y el presidente; bueno, dejemoslo pasar.

Ayer, en la tertulia de politicos de La Ventana, salio el tema del crucifijo otra vez y escucho a Jorge Fernandez Diaz, representante del PP, defender el crucifijo, invocando una de las opciones que legalmente estan establecidas (juramento o promesa), que "cuando se jura, se jura poniendo a Dios por testigo de que lo que se dice es verdad". No se que pintan entonces, el Ministro de Justicia como Notario mayor del Reino y el resto de los presentes; con un certificado del parroco del barrio, como que el ministrable ha jurado ante Dios, nos podemos ahorrar mucho tiempo y dinero.
No se, si esto quiere decir, que si miente o hace alguna barrabasada, solo respondera ante Dios y ante la historia (sagrada, po supuesto).
Dejando las bromas aparte una lineas, considero que si en la ordenacion sacerdotal, no hay simbolos del Estado Español, como la bandera, la Constitucion y ningun representante del Estado en mision oficial, en los actos de ordenacion ministerial y presidencial, no deben haber simbolos confesionales de la religion catolica, ni de ninguna otra religion. El ministrable catolico, si quiere, puede irse tras la ceremonia civil, a la iglesia mas proxima y jurar ante Dios en silencio o ante la asamblea de fieles catolicos.
No me molesta el crucifijo ni la Biblia, pero si me molesta, que no se delimiten los actos de estado y los de la iglesia catolica o de cualquier otra confesion. A este paso, podriamos ver a todo el Consejo de Ministros, jurando ante un bonsai de la Moncloa llevado a la Zarzuela,utilizando la frase de Lo que el viento se llevo: "A Dios pongo por testigo, ..."