La Comuna de Paris

Hoy se cumplen 135 años de la revuelta que dio lugar a la llamada Comuna de Paris.
En estos dias, asistimos a una revolucion juvenil en Francia, sobre todo en Paris, motivada por la intencion del gobierno frances de implantar un contrato del primer empleo, que a juicio de los jovenes les perjudica seriamente.
LLevan ya tres dias de movilizaciones y enfrentamientos callejeros, que recuerdan a Mayo del 68, aunque las motivaciones sean diferentes y los apoyos no tan grandes como entonces, ...de momento.
Esta claro que gobernar un pais es dificil, que a veces hay que tomar decisiones que no son agradables para los ciudadanos, pero deberia reflexionar el gobierno frances, porque en pocos meses, se ha echado encima a gran parte de la poblacion, especialmente juvenil. No es posible gobernar de espaldas a los ciudadanos y desde luego, con tan poco tacto.
No espero ni deseo que se llegue a una situacion como la de Mayo del 68 y mucho menos a la de La Comuna de Paris, pero cada vez mas, queda demostrado que este gobierno hace aguas por todos lados. Entro con mal pie, o mejor dicho con malos pies, porque en el fondo, esta la lucha por el poder Presidencial del Primer ministro y del Ministro del Interior. Mas vale que esten atentos a su trabajo, no vayan a encontrarse con problemas extras que a nadie le interesaria y mucho menos a la ciudadania de Francia.

LA WEB NUESTRA DE CADA DIA: Gabriel Celaya
Nacio tal dia como hoy, alla por el año 1911. Fue una de la voces que nos acompaño en la transicion española, por lo menos a algunos imberbes democratas. Escuchamos su poesia en su voz, en las voces musicadas de otros juglares, compañeros de viaje, pero sobre todo, escuchamos el mensaje que nos oxigenaba el corazon, para poder seguir adelante. Murio hace 15 años, pero tan solo se fue su cuerpo fisico, porque su alma nos acompañara toda la vida.

PORQUE SÍ

Pececito esquivo,
caballito que monto,
delicia que no nombro,
y quiero, quiero, quiero.

Cuando te beso, acierto;
cuando te toco, creo;
si te acaricio mido
mi infinito deseo.

Mas te prolongas lejos;
eres más, eres lo otro,
lo que nunca apreso
aunque te toco y beso.

siempre un poco esquiva,
siempre resbalada,
tú, que nunca entiendo,
y quiero, quiero, quiero.

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